OnePlus 6T tras 6 meses de uso
Llevo aproximadamente seis meses utilizando un dispositivo OnePlus 6T de 8 GB de RAM y 128 GB de almacenamiento, y es el mejor móvil que he tenido nunca, aunque también es el más caro. Por este motivo quería dar mi perspectiva sobre el terminal y los detalles que aporta en mi día a día. Quisiera aclarar que a día de hoy considero mejor compra el OnePlus 7, ya que está prácticamente al mismo precio y es más actual, a no ser que se encuentre una oferta bastante llamativa para el 6T.
Empezando por el diseño, la pantalla es el apartado más llamativo. El móvil viene con un protector de pantalla de plástico ya aplicado, el cual empieza a mostrar rasguños tras un par de meses de uso, y con una funda transparente, la cual es prácticamente imposible mantener limpia y donde las huellas se notan demasiado. Estas dos protecciones han logrado su trabajo satisfactoriamente y aún no he notado ningún desperfecto en el terminal, aún habiendo sido sometido a alguna caída. El aprovechamiento de pantalla es increíble y la muesca tipo gota es tan poco intrusiva que apenas se nota. La ausencia del puerto de auriculares no fue un inconveniente para mí ya que usaba auriculares inalámbricos desde antes, y los botones externos funcionan bastante bien, siendo un añadido el deslizador, el cual es bastante útil para silenciar el terminal antes de entrar a una clase o a una sala de cine, entre otros casos.
El hardware es de lo mejor que hubo en el 2018, sobre todo por el procesador (Snapdragon 845) y la capacidades de RAM que ofrece OnePlus (6 y 8 GB). El almacenamiento también es excelente, habiendo ocupado tan solo un 39% de éste tras 6 meses de uso y teniendo 142 aplicaciones instaladas, 400 canciones, +4700 fotos y vídeos... No trabajo con archivos especialmente grandes (grabaciones de vídeo a 4K/60FPS, fotografías en formato RAW, etc.), así que la falta de ranura para tarjetas microSD no me causa ningún inconveniente aunque, teniendo disponible una versión de 256 GB de almacenamiento, no creo que sea necesaria. En este apartado no he notado ninguna ausencia importante e incluso se agradece la potencia que ofrece, sobre todo gracias al procesador. El altavoz es suficientemente alto, el motor de vibración es correcto y el altavoz frontal ofrece una buena calidad de sonido en llamadas, incluso en exteriores. El micrófono se escucha bien y no he tenido ningún problema con ninguno de los componentes físicos del terminal.
En cuanto a la pantalla, la calidad que ofrece la tecnología Optic AMOLED es increíble. Ver vídeos, leer, usar redes sociales y jugar son acciones que se realizan mejor con esta relación de aspecto 19.5:9, aunque a veces hay aplicaciones o juegos que no la soportan y que muestran una barra negra en la parte superior. A pesar de esto, el contenido se muestra en 16:9 y no es problemático. Gracias al sistema por gestos de OxygenOS he conseguido aprovechar aún mejor la pantalla y dicho sistema funciona de manera bastante fluida, siendo su uso bastante intuitivo. Bajo dicha pantalla se encuentra un lector de huellas que funciona adecuadamente, aunque la mayor parte del tiempo uso el reconocimiento facial que es muchísimo más rápido. Se agradece la inclusión de dicho lector de huellas en situaciones donde el móvil está sobre una mesa y se hace incómodo acercar la cara a la cámara frontal. El brillo máximo es bastante adecuado, incluso bajo incidencia solar, aunque he visto otros dispositivos, sobre todo de Samsung, que ofrecen mayor brillo.
En el apartado fotográfico, aunque en la mayoría de reviews que había visto lo mencionaban como el punto más negativo, mi experiencia ha sido buena. Cabe resaltar que me instalé la GCam, aunque la mayoría de las veces que quiero sacar alguna foto rápida uso la cámara principal, la cual proporciona buenos resultados. La aplicación de cámara es sencilla e intuitiva y tiene un detalle que considero bastante útil que es un botón para hacer un zoom x2 (aunque no sea óptico, ya que la segunda cámara frontal es simplemente para detectar profundidad), puesto que es una manera bastante sencilla de sacar una foto a algún objeto que se encuentre relativamente alejado.
Pasando a la batería, lo considero uno de los puntos más fuertes del dispositivo, puesto que ha llegado a darme 2 días completos de uso de una sola carga. Con un uso más excesivo me ha durado menos, pero siempre llego al final del día con algo de batería. Otro punto fuerte es la carga, puesto que es muy veloz con el cargador que viene incluido en la caja, llegando al 100% en aproximadamente una hora. Si a esto le sumamos que la pantalla cuenta con tecnología OLED, la cual logra negros más puros apagando los pixeles individualmente; si aplicamos temas y fondos de pantalla oscuros, la batería se prolongará aún más. La ausencia de carga inalámbrica no me ha afectado en absoluto y me parece un acierto incluir el cargador de carga rápida en la caja, a diferencia de otros terminales.
Con el software he tenido una experiencia similar, ya que OxygenOS es una de mis capas de personalización favoritas. Uno de los puntos más fuertes es la fluidez de las animaciones, que ayudan a hacer sentir el terminal aún más rápido de lo que es, sobre todo al abrir aplicaciones, cambiar entre ellas y volver a la pantalla de inicio. El aprovechamiento de la RAM es bastante bueno, ya que volver a aplicaciones previamente abiertas es casi instántaneo, y siguen en el estado en que se dejó al salir de ellas. La personalización también está bastante presente, ya que podemos cambiar la apariencia de los iconos, el número de columnas y el tamaño de las aplicaciones. También, podemos cambiar el tema entre claro, a color u oscuro, siendo éste último el óptimo para ahorrar batería, e incluso se puede modificar el color de énfasis que veremos tanto en la barra de notificaciones como en la pantalla de ajustes. Existen multitud de detalles más, entre ellos uno de mis favoritos que es la capacidad de mostrar la velocidad de la red en la barra de estado superior, o la característica de que al levantar el móvil veamos rápidamente la hora, el día, el porcentaje de batería y pequeños iconos para mostrar de qué aplicaciones tenemos notificaciones. Esto último es una especie de "Always On Display", aunque en este caso no siempre está activado. Por último, cabe resaltar que las actualizaciones se realizan con bastante regularidad, estando a la altura de los propios dispositivos de Google, lo cual es bueno tanto para el rendimiento como para la seguridad del terminal. Una de las últimas actualizaciones recibidas es la del modo Zen y el modo de juego Fnatic, los cuales estaban ya disponibles para los terminales más recientes de OnePlus (7 y 7 Pro), lo cual denota que son capaces de traer las últimas características incluso a sus anteriores móviles.
En conclusión, como estudiante y como usuario medio de un teléfono móvil, el OnePlus 6T es completo, y tras el paso de un par de meses aún sigue siendo tan rápido y fluido como predicaban en las campañas publicitarias. La batería llega al final del día sin problemas, la experiencia de uso es muy agradable y no hay grandes carencias, sobre todo para un usuario medio como yo.
Con el software he tenido una experiencia similar, ya que OxygenOS es una de mis capas de personalización favoritas. Uno de los puntos más fuertes es la fluidez de las animaciones, que ayudan a hacer sentir el terminal aún más rápido de lo que es, sobre todo al abrir aplicaciones, cambiar entre ellas y volver a la pantalla de inicio. El aprovechamiento de la RAM es bastante bueno, ya que volver a aplicaciones previamente abiertas es casi instántaneo, y siguen en el estado en que se dejó al salir de ellas. La personalización también está bastante presente, ya que podemos cambiar la apariencia de los iconos, el número de columnas y el tamaño de las aplicaciones. También, podemos cambiar el tema entre claro, a color u oscuro, siendo éste último el óptimo para ahorrar batería, e incluso se puede modificar el color de énfasis que veremos tanto en la barra de notificaciones como en la pantalla de ajustes. Existen multitud de detalles más, entre ellos uno de mis favoritos que es la capacidad de mostrar la velocidad de la red en la barra de estado superior, o la característica de que al levantar el móvil veamos rápidamente la hora, el día, el porcentaje de batería y pequeños iconos para mostrar de qué aplicaciones tenemos notificaciones. Esto último es una especie de "Always On Display", aunque en este caso no siempre está activado. Por último, cabe resaltar que las actualizaciones se realizan con bastante regularidad, estando a la altura de los propios dispositivos de Google, lo cual es bueno tanto para el rendimiento como para la seguridad del terminal. Una de las últimas actualizaciones recibidas es la del modo Zen y el modo de juego Fnatic, los cuales estaban ya disponibles para los terminales más recientes de OnePlus (7 y 7 Pro), lo cual denota que son capaces de traer las últimas características incluso a sus anteriores móviles.
En conclusión, como estudiante y como usuario medio de un teléfono móvil, el OnePlus 6T es completo, y tras el paso de un par de meses aún sigue siendo tan rápido y fluido como predicaban en las campañas publicitarias. La batería llega al final del día sin problemas, la experiencia de uso es muy agradable y no hay grandes carencias, sobre todo para un usuario medio como yo.
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